Que pensaríais sobre una parte de vuestra casa, como el ejemplo que os presentamos a continuación, una terraza de 120 m2 que ha sido desaprovechada durante aproximadamente 25 años…
Pues esto és lo que acostumbra a pasar en estas partes de las casas, ya que una terrazasi no tiene como mínimo una parte cerrada, acaba por no ener ningún uso en nuestra vida habitual.
La parte buena de todo esto és que tenemos una gran diversidadde opciones que nos darán la oportuniad de disfrutar de estos espacios, y pueden acabar siendo el lugar donde acabemos pasando nuestros mejores momentos, aparte de darle un valor mucho más alto a nuestra vivienda, revalorizándola.

En este caso, Solersia ejecutó el cerramiento de una parte de la terraza que era de la totalidad de la superficie del piso inferior, consiguiedo el sueño de la propiedad, una sala polivalente, con mucha luz, una decoración industrial combinando hierro, carpintería de aluminio y cristal.
Partiendo de la estructura metálica de la casa, se soldaron unas vigas para dar continuidad y formar una estructura de vigas de hierro, a las que atornillamos viguetas de madera maciza tractada sin pulir, para darle un toque más  rústico a la construcción.
Una parte muy importante de la construcción és el techo. Consiste en paneles tipo sandwich formados por una  parte inferior a escojer entre diferentes opciones, aislamiento de espuma de poliuretano inyectada y aglomerado exterior (una vez puestos los paneles, encima se acaba con un onduline anti goteras y teja cerámica a escoger). Por  tanto, en nuestro caso optamos por un acabado interior de pladur, un aislamiento de 100 mm de grosor y el  acabado exterior de teja tipo arábiga.
Los paneles se atornillan a la estructura, el onduline clavado al panel por el aglomerado exterior y las tejas fijadas  con mortero o espuma especial al onduline.
Resultado, un acabado estético inmejorable y un aislamiento térmico difícil de superar, aparte de tener un tejado ventilado. PERFECTO!

La siguiente parte a destacar és el envolvente, que en parte se hizo con obra y sus correspondientes aislamientos y doble pared, y toda la parte que consta de cerramiento con cristal, que se ha realizado con:
– perfilería de rotura de puente térmico de 61 mm de grosor, serie 61RPT C16 E13 de Itesal
– tripe cristal de cámara 4/16/4/16/4 4s planitherm con lámina de control solar.

 

Pero, en qué se traduce todo esto?

Con las carpinterías de rotura de puente térmico, conseguimos aislar el ambiente exterior del interior, gracias a que los perfiles que componen las ventanas que fabricamos en Solersia, se dividen en 2 partes, exterior e interior
y al mismo tiempo éstas están unidas por una poliamida o PVC rígido. Esto significa, que cuando el ambiente exterior quiera pasar a través del perfil de aluminio, que és conductor, se encontrará con un producto intermedio que no se lo permite, que ROMPE LA TRANSMISIÓN, y por esto lo llamamos ROTURA DE PUENTE TÉRMICO.
Además, debemos añadir los herrajes utilizados para el buen funcionamiento de los cerramientos fabricados en Solersia, que a diferencia de la mayoría de fabricantes són con el sistema de Canal 16. Esto nos comportará un mayor solapamiento de la hoja en el marco, mejores posibilidades de ajustamiento y lo más importante, muchos más puntos de cierre ofreciendo un cerramiento perimetral al largo de toda la ventana, a diferencia del más que habitual canal europeo utilizado por la mayoría de talleres e instaladores. En Solersia apostamos por este tipo de cerramiento para ofrecer la mayor calidad, estanqueidad y también diferentes niveles de seguridad.
En cuanto al cristal de cámara utilizado, se apostó por un triple cristal con dos cámaras para poder ofrecer con un mismo producto:
– el máximo aislamiento térmico, pensando en que se trata de una construcción con mucha parte acristalada
– un buen aislamiento acústico pensando en el ruido que nos puede molestar procedente del exterior, como el que podemos producir nosotros en el interior
– uno de los cristales lleva incorporada una lámina de control solar, ya que en verano sería cuando podríamos sufrir más las inclemencias del tiempo, que asimismo también nos mejora las prestaciones para mantener el ambiente que creemos en el interior del habitáculo

RESULTADO

 

– con una inversión menor que una construcción tradicional, conseguimos un resultado estético impactante, pero sobretodo, lo más importante és que podemos disfrutar de un espacio de 70 m2 todas las estaciones del año con una variación mínima de temperatura en su interior
– la utilización de materiales de muy buena calidad por parte de Solersia, nos permitirá en este caso disfrutar de un habitáculo confortable tanto invierno como verna, con un ambiente interior protegido y saludable, evitando y
contribuyendo a la reducción de emisiones de gases a la atmósfera, y la reducción del gasto energético, ya que no utlizaremos ni calefacción ni AC.
Finalmente dejar un apunte sobre el tiempo empleado en la construcción del mismo, y és que se hizo toda la obra en un período de 2 meses de principio a fin, interior incluído y pintura exterior de la fachada. Des de Solersia, lo
consideramos un avance considerable sobre el sistema tradicional de construcción, mejorando gasto, tiempo empleado y sobretodo confort.

Hasta la próxima, gracias y salud.